Capitulo 4

T: chicos ya recuerdo todo, fue un GRAN malentendido – dijiste resaltando dicha palabra-
J y Y: conta – guardaron silencio para escucharte –
T: recuerdan que anteayer fuimos al cine, vos –señalando a Jerry – Tomas y yo? – tus amigos asintieron con la cabeza pero no emitieron palabra para que siguieras con el relato- bueno, fuimos al de acá a la vuelta a ver Terminador 3 y cuando salimos de la sala les dije a los chicos que me esperen que tenia que ir al baño, cuando salía de este, una manada de chicas me aturdieron gritándome en el oído y empujándome como desesperadas, obviamente era porque los chicos estos, como es que se llaman? – le preguntaste a Yami –
Y: Jonas
T: esos, estaban haciendo la invasión a los cines para promocionar su película, entonces yo trataba de caminar para encontrarlos a ustedes pero las chicas me rodeaban y no me dejaban ver bien, entonces empecé a hacer punta de pie para ver mejor, y en eso una chica me empujo y me caí, y gracias a este chico, Joe, no me quede estampada al piso, porque me agarro en sus bazos…
Y: - te interrumpió – entonces en ese momento sacaron la foto y se armo todo este chisme
T: exacto!- miraste tu reloj y te diste cuenta que ya había pasado media hora desde que hablaste con Santi – chicos me voy, tengo que contarle todo a Santi, los amo , gracias por ayudarme.
Los saludaste con un beso a cada uno y te dirigiste a tu apartamento. Llegaste 5 minutos antes de lo acordado, subiste y esperaste que este llegue, pensando en como seria la mejor forma de explicarle. Luego de unos minutos el timbre sonó y Santi subió asta tu departamento en el 2do piso.
Trataste de darle un beso como saludo, pero el te esquivo. Te quedaste como en shock, nunca te había tratado así, pero igual lo entendías aunque te molestaba su desconfianza.
T: pasa – el entro y se sentó en tus enormes sillones color rojo –
S: te escucho – dijo en un tono cortante –
Te sentaste alado de el, le tomaste las manos y le explicaste todo, tal cual sucedió, y esperaste atentamente a ver que decía…
S: así que todo fue un mal entendido? – dijo formando una sonrisa que te devolvió el alma al cuerpo –
T: si amor, sabes que jamás te cambiaria – te paraste de tu lugar y te sentaste sobre el rodeándolo con tus brazos-
S: enserio, nunca me cambiarias?
T: enserio, te amo
S: y yo a vos – rodeos con sus brazos tu cintura y se unieron en un hermoso beso – me asuste mucho al pensar que te podía perder – dijo sobre tu oído
T: y yo en pensar que te perdería a vos, no se ni quien es este chico, aunque pensándolo bien, no esta tan mal, es bastante lindo – le sonreíste como provocándolo
S: ey! – y te empujo suavemente el hombro –
T: mentira amor, solo tengo ojos para vos
Nuevamente se unieron en un beso que fue tomando velocidad, te paraste de su falda sin dejar de besarlo y te sentaste nuevamente sobre el pero esta ves frente a frente, dejando una pierna a cada lado de el. El empezó a subir tu remera, hasta sacarla del todo, y tu imitaste su acto, sacándole la de el. Luego el dejo de besarte para darte suaves besos en el cuello y empezar a jugar con tu oreja derecha, que te encantaba porque hacia que te den cosquillas. Sus cuerpos iban entrando en calor cuando el timbre los interrumpió, haciendo que ambos pongan cara de enojados, entonces se pararon rápidamente y se pusieron cada uno su respectiva remera.
Al abrir la puerta…